Por Angel Di Matteo   @shadowargel

Los delincuentes utilizan las cuentas para concretar negocios con contactos de confianza de la persona hackeada, y una vez recibida la transferencia por concepto de la operación desaparecen impunemente con el dinero de la víctima.

***

El auge de Bitcoin y las principales criptomonedas cada día atraen a una mayor cantidad de personas ajenas a este ecosisitema, quienes al ver como el mundo habla cada vez con más frecuencia sobre estos activos entienden que podría haber una buena oportunidad para invertir y derivar ganancias, muchas veces sin tomar tiempo para estudiar el adecuado funcionamiento de estas tecnologías y sus mercados asociados.

Buena parte del auge que ganan las criptomonedas se debe a que son un excelente medio para almacenar valor y adquirir tanto bienes como servicios en países con fuertes inconvenientes financieros, donde los ciudadanos deben buscar mecanismos para proteger en alguna medida su poder adquisitivo, recurriendo a activos con más valor que las monedas de curso legal de sus países de residencia.

Son muchas las personas y organizaciones que aprovechan este auge para perpetuar estafas, atrayendo a las personas con lo que parecieran ser excelentes oportunidades de inversión para luego desaparecer con el capital sustraído, dejando a las víctimas sin posibilidad de recuperar su dinero o sus monedas digitales.

Por ello, DiarioBitcoin alerta a los usuarios sobre un tipo de estafa que cada vez resulta más frecuente a través de redes sociales, donde desconocidos toman control de cuentas ajenas en plataformas como Facebook e Instagram para hacer ofertas fraudulentas a contactos de las personas afectadas.

Ubicando a las víctimas

A diferencia de los tipos de estafas más comunes, como los esquemas piramidales y las negociaciones donde alguna de las partes incumple los términos acordados, en esta modalidad un hacker toma control de la cuenta de un usuario a través de una red social, aprovechando claves inseguras, malwares que registran lo escrito en los teclados, técnicas de Phishing o mecanismos para burlar sistemas de verificación con mensajes SMS.

Generalmente el hacker busca usuarios que suelan hacer transferencias internacionales, o en su defecto comercien con dólares o criptomonedas en países como Venezuela, lugar donde este tipo de prácticas son comunes a razón de la enorme diáspora migratoria y el constante envío de remesas a contactos residentes en la nación.

Una vez hecho con el control de la cuenta, el hacker comienza a estudiar los post publicados, así como conversaciones con contactos conocidos, y de esta forma identificar personas a las cuales pueda engañar haciendo una oferta para el comercio de dólares o monedas digitales.

Modus operandi

Una vez hecho lo anteriormente descrito, el hacker selecciona personas entre los contactos que sean de confianza para el afectado y les escribe tratando de parecer la persona en cuestión. Hecho el contacto, procede a formular la oferta respectiva, alegando tener una emergencia y necesitar rápido el capital respectivo en bolívares.

Una vez pautado el precio respectivo y los mecanismos para la transferencia de los dólares o criptomonedas, el hacker pasa al contacto una imagen editada (captura de pantalla), en la que asegura haber cumplido con su parte del trato. Dado que se trata de una persona de confianza, el delincuente se ampara en la posibilidad de que la víctima no revise su cuenta / wallet para constatar la disponibilidad de los activos, e invita a que le hagan el depósito correspondiente en bolívares a la cuenta proporcionada.

Posteriormente el delincuente toma los fondos y desaparece con ellos, y la persona afectada al revisar su cuenta / wallet después de transferir los bolívares se percata de la estafa.

Algunas consideraciones

De acuerdo con algunos testimonios, los afectados creen que dado lo fácil que resultaría rastrear los fondos una vez que llegan a una cuenta bancaria, la operación podría estar asociada con personas detenidas en cárceles venezolanas, quienes operan impunemente ya que no habría ninguna sanción que resulte efectiva.

En muchos casos, no solo resulta afectada la persona que cayó en la oferta fraudulenta pensando que la hizo un contacto de confianza,  puesto que también puede perjudicar a la persona cuya cuenta fue hackeada. En ocasiones los hackers aprovechan y también pautan operaciones con extraños en grupos, dejando la deuda al propietario de la cuenta, quien muchas veces la asume con temor de que la contraparte actúe legalmente o atente contra la seguridad del afectado o sus familiares.

Recomendaciones importantes

Visto lo delicada que puede resultar esta situación, algunas personas afectadas extienden algunas recomendaciones importantes para evitar ser víctimas de estafas:

  • Mantener a buen resguardo las contraseñas de redes sociales, e intentar utilizar algunas que tengan un alto grado de complejidad. Cámbiela constantemente y no utilice la misma en distintos sitios web.
  • Evite introducir datos privados en redes sociales. De igual manera verifique enlaces URL para no caer víctima en páginas que en apariencia parezcan las redes sociales que habitualmente usa.
  • Proteja su cuenta con sistemas de autenticación de dos factores, preferiblemente Google Authenticator. Evite utilizar SMS o correos electrónicos, ya que son mucho más vulnerables.
  • Cuide su identidad en redes sociales. Evite confiar en personas que soliciten transferencias de emergencia o realice propuestas muy prometedoras.
  • Y lo más importante… no ofrezca información privada a personas desconocidas.

Si desea conocer más sobre otro tipo de estafas comunes con criptomonedas, le invitamos a leer nuestra guía para identificar propuestas fraudulentas, a la cual podrá acceder haciendo clic aquí.

Artículo elaborado por Angel Di Matteo / DiarioBitcoin

Imagen de Unsplash

ADVERTENCIA: Este es un artículo de carácter informativo. DiarioBitcoin es un medio de comunicación, no promociona, respalda ni recomienda ninguna inversión en particular. Vale señalar que las inversiones en criptoactivos no están reguladas en algunos países. Pueden no ser apropiadas para inversores minoristas, pues se podría perder el monto total invertido. Consulte las leyes de su país antes de invertir.