Por Arnaldo Ochoa   @arnaldochoa


Luego de ver que el poder pasó a manos de Alberto Fernández, allegado a Cristina Kirchner, examinamos si Argentina podría en un futuro seguir los pasos de Venezuela en la creación de un criptoactivo propio, similar al petro.

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Han pasado apenas meses desde que Mauricio Macri entregó la presidencia de Argentina a Alberto Fernández, cuya vicepresidenta es la cuestionada ex mandataria Christina Kirchner (cuyo ejercicio presidencial fue muy polémico).

La situación económica actual hace que muchos analistas vean a Argentina como el próximo país que podría emular algunas acciones políticas y económicas llevadas a cabo en Venezuela.

Por ende, nos preguntamos si Argentina estaría en capacidad de emitir su propio criptoactivo, en una ruta y contexto parecido a los recorridos por el Petro de Venezuela.

¿Seguirá Argentina un camino similar a Venezuela con el petro?

En 2018, y luego de que el gobierno venezolano anunciara el lanzamiento del petro, Argentina fue uno de los primeros países en descartar su uso para realizar transacciones con Venezuela.

Nicolás Dujovne, ministro de Finanzas para ese entonces, aclaró que el gobierno de su nación (durante el mandato de Mauricio Macri) no tendría relaciones comerciales con el criptoactivo de Venezuela.

En su momento, Dujovne dijo:

Argentina ha adoptado una posición fuerte y firme. Somos uno de los primeros países que advirtió que Venezuela no es una democracia, que los derechos humanos no son respetados y que tiene varios presos políticos. El gobierno de Argentina no realiza transacciones con ningún tipo de criptomoneda y mucho menos lo haría con Petro.

Para ese entonces, al gobierno de Macri no le interesaba acercarse a Venezuela. Por el contrario, su estrategia estaba más enfocada en EE UU, en aras de fortalecer sus relaciones comerciales y diplomáticas.

Por su parte, en una entrevista concedida al medio CoinStaker, Lucas Llach, vicepresidente del Banco Central de Argentina, afirmó que, a diferencia de otros países como Venezuela, Irán y Bangladesh, el gobierno de su país no tenía contemplada la creación de una criptomoneda oficial en el corto plazo.

Actualmente, las monedas digitales no cuentan con legalidad en Argentina. Para saber más del tema, puede leer aquí Todo sobre Bitcoin y criptomonedas en Argentina.

¿Caldo de cultivo para un “petro” en Argentina?

Las estadísticas indican que las recetas políticas caducas en Argentina han llevado al país al hundimiento económico y social continuo, al menos desde 1.950. Solo hay que ver cómo se ha comportado el PIB per cápita de Argentina desde esa época, respecto al de un país como Australia, para ver claramente la caída desde tiempos de Perón.

Comparación entre Australia y Argentina desde 1.950 en cuanto a PBI per cápita

En su momento, la presidencia de Macri, pro-libre mercado, desembocó en una economía en recesión, devaluación de la moneda y aumento desmedido en los precios. No obstante, sus años de gobierno fueron -según muchos analistas- mucho menos calamitosos que los gobiernos que lo precedieron: el de Néstor Kirchsner y el de la esposa de este, Cristina, quien ahora será vicepresidenta.

Cuando quedó claro que Fernández probablemente ganaría, el peso cayó 15% frente al dólar (la caída intradía tocó el 25 %), y la bolsa, un 48 % (la mayor bajada de su historia). La confirmación de la victoria, sin embargo, no calmó los nervios: los comerciantes aumentaron aún más los precios anticipando mayor devaluación, inflación y estampida hacia Bitcoin.

Posteriormente, se han firmado controles de moneda más estrictos, anunciados por el banco central. Estos ahora limitan las compras en dólares a sólo USD $200 por mes, en comparación con el límite de USD  $10.000 impuesto en septiembre. Todo, con la idea de impedir una debacle del peso.

A su vez, los argentinos cada vez más usan las criptomonedas como refugio. Al menos eso puede verse en la plataforma persona a persona Localbitcoins. 

Argentina y el espejo

Salvando las distancias, según algunos analistas, Argentina pudiera tener que verse en el espejo de Venezuela, un país cuyo mandatario nacional, ante la debacle de su moneda nacional, ha tenido que recurrir a artificios monetario-digitales como el petro.

Analistas como Andres Oppenheimer han sostenido posiciones en las que prácticamente igualan a las economías de ambos países en cuanto a decisiones a tomar. Por su parte, el escritor y sociólogo argentino Atilio Boron, sostiene que “el chavismo, al ser el primer gobierno que emite su propia criptomoneda, respaldada, supuestamente, en petróleo y oro, ha reconocido formalmente que su bolívar es una estafa, que no vale absolutamente nada, por más que le pongan o le saquen los ceros o le cambien el nombre”.

¿Pasará igual con el peso argentino? Está por verse.

Intentos municipales, regionales y privados

Argentina no es un país conocido por sus intenciones de crear una criptomoneda propia, como sí lo son China, Rusia o en menor medida EE. UU. y la Comunidad Económica Europea. Sin embargo, podemos destacar algunas iniciativas a nivel local de criptomonedas municipales o regionales. Si bien no llegan a la categoría de criptoactivo nacional como el petro en Venezuela, bien pudieran ser referencia a futuro para tal fin:

Activos Marcos Paz

Como informó DiarioBitcoin en julio, el municipio Marcos Paz, en Buenos Aires, Argentina, fue la primera municipalidad del país en lanzar una criptomoneda llamada “Activos Marcos Paz” (MMP), creada para el uso exclusivo dentro de la comunidad.

MMP fue desarrollada por Koibanx, una startup argentina con presencia en Uruguay y Colombia, y que además desarrolló una aplicación de billetera.

A través de la aplicación, los vecinos del municipio podrán utilizar la moneda digital para comprar en comercios locales o para recibir recompensas por acciones ciudadanas, como el pago de impuestos, bicicletas y reciclaje.

Peso virtual PAR

Lanzada en Argentina en mayo de 2017, PAR, también conocida como el “peso virtual”, es una moneda virtual de crédito mutuo basada en el Blockchain de Bitshares y desarrollada por WABA.network. Por lo tanto, aseguran que todas las transacciones son públicas, transparentes y seguras.
La moneda del sistema es un token digital llamado PAR, intercambiable mediante billeteras virtuales y solo puede utilizarse para comprar bienes y servicios a otros miembros de la red. Asimismo, cada PAR en circulación está garantizado por las transacciones que tienen lugar dentro de la comunidad.
Por conveniencia, se ha establecido una relación de uno a uno entre el PAR y el peso argentino. Así, en la red PAR el peso argentino es la unidad de cuenta y el PAR es el medio de cambio.  A través de PAR, los miembros tienen acceso a liquidez sin necesidad de depender del sistema bancario tradicional, es decir, no dependen de nadie más que de sí mismos.  Si quiere saber más sobre la cripto, lea nuestro trabajo sobre PAR.

JellyCoin del Proyecto Colmena

Según lo reseñado por DiarioBitcoin en su momento, el Ministerio de Industria de la Provincia de Misiones, estaría trabajando en la creación de la JellyCoin, una criptomoneda propia que formaríaparte del proyecto “Colmena”.

El proyecto Colmena se está planteando para trabajar con todo lo que es el proceso de recolección de residuos. El proyecto busca incentivar la participación de los ciudadanos para que puedan ser ellos mismos quienes formen parte de la recuperación y procesamiento de los residuos que provienen de los hogares.

El objetivo de la JellyCoin es brindar un sistema de retribución a los participantes por su cooperación en los procesos de recolección. Según lo mencionado por los desarrolladores, JellyCoin permitirá trabajar con los desperdicios como si estos fueran un “commodity”.

Ecodocta de Córdoba

Según esta propuesta, una persona pudiera cobrar por depositar basura que puede ser reciclada. De eso se trata Ecodocta, un emprendimiento creado por los cordobeses Jorge Passetti y Daniel Tolosa, con un perfil bien claro.

La misión es insertar en la sociedad una cultura colaborativa con acciones comunitarias, como el reciclaje, a cambio de una recompensa que, en este caso, se plasma a través de una criptomoneda propia, a la que llamaron “docta”.

El proyecto comenzó a principios de 2018 y el año pasado tomó forma. Su prueba piloto tuvo lugar en la Universidad Católica de Córdoba (UCC), entidad que los incubó mediante la Fundación Gen E. Allí instalaron en julio pasado una máquina en la que se depositan y compactan botellas, tapas de plástico y vasos de telgopor. Su segunda recicladora fue colocada hace poco en Espacio Abasto.

Fuentes: Cointelegraph, La Voz, IProUp, Coinstaker, Panam Post.

Artículo de Arnaldo Ochoa / DiarioBitcoin.

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